El inicio del mutualismo catalán se remonta a la Edad Media, cuando los gremios y cofradías se organizaron para apoyarse mutuamente en caso de necesidad. La industrialización, en el siglo XIX, supuso un impulso del modelo mutualista, en un entorno de falta de protección pública y el desamparo de los trabajadores más desprotegidos y sus familias, que se agruparan y socorrían mediante humildes cuotas. También otros grupos, como profesionales (abogados, médicos, etc.) se agruparon para darse protección mutua.
La Federación de Mutualidades de Cataluña
Constituida en 1896 como “Unión y Defensa de Montepíos de la Provincia de Barcelona y sus Afueras”, la Federación se ha mantenido fiel a su espíritu fundacional: la representación y promoción de la previsión social. Esto le ha conducido a dejar una gran huella en la sociedad actual, y los logros alcanzados en estos más de 125 años de trayectoria son incontables.
El impacto social de las mutualidades
Las mutualidades catalanas no solo velan por el bienestar de sus mutualistas, sino que, además, están ampliamente involucradas en diversas actividades de carácter social vinculadas a su territorio. Cada año la Federación de Mutualidades de Cataluña hace una recopilación de las principales actividades sociales en las que han participado las mutualidades catalanas, y las cifras que alcanzan son admirables. El pasado 2023, las actividades descritas en esta memoria sumaban 95 y la inversión total aproximada por parte de las mutualidades era de unos 350.000 euros.
Estos datos no hacen más que demostrar la fuerte implicación de las mutualidades en la sociedad civil de su territorio y evidencia, una vez más, el carácter no lucrativo de estas entidades.
El impacto económico de las mutualidades
Otro aspecto a considerar de las mutualidades son sus cuentas, que se aprueban en una Asamblea General Ordinaria anualmente. El estudio anual comparativo de los datos del sector de 2023 ha confirmado la tendencia al alza del mutualismo, con un volumen de primas de 285,1 millones de euros, un 0,75% por encima del ejercicio anterior. En total, en 2023 las mutualidades de previsión social ofrecieron cobertura y protección a 1.542.000 personas y ampliaron su número de socios y sujetos protegidos.
En definitiva, el trabajo realizado por las mutualidades catalanas ha llegado muy lejos y su impacto ha sido de lo más favorable para la sociedad. ¡Desde la Federación deseamos que continuéis acompañándonos a lo largo de este camino y que podamos lograr muchos más retos juntos!